El pasado viernes 17 de octubre, alrededor de 80 personas procedentes de diferentes realidades sociales respondieron a la convocatoria que, para conmemorar el Día Mundial para la Erradicación de la Extrema Pobreza, hicimos desde EAPN Madrid, Movimiento ATD Cuarto Mundo y la Parroquia San Carlos Borromeo. Así, la jornada se fue llenando de encuentros y diálogos, tanto personales como en grupo, que nos permitieron a cada persona ir más allá de lo que vivimos habitualmente y reflexionar con otros sobre qué es la pobreza y cómo luchar contra ella, a través del cruce de nuestras diferentes experiencias y saberes.

IMG_5090De esta manera, a lo largo de la mañana fueron surgiendo diferentes imágenes sobre la pobreza en los distintos grupos de trabajo que se formaron. Estos grupos se convirtieron en un espacio de encuentro entre personas cuyo saber sobre la pobreza tiene un origen común, bien sea por haberla vivido en primera persona, bien por haberla conocido a través de su trabajo profesional o institucional, bien por estar comprometidos voluntariamente al lado de quienes la sufren. De esta manera, el saber de cada participante se entrelazaba con el de otros que comparten una posición vital similar, construyendo así, en el diálogo, una idea colectiva sobre la pobreza que poder compartir con los otros grupos. Después, al intercambiar entre quienes han tenido experiencia de vida difícil, profesionales y voluntarios/as, el diálogo se fue poblando de diferentes imágenes y palabras que articularon el diálogo, permitiéndonos entender mejor qué es la pobreza: una realidad marcada por el abandono y la vulnerabilidad, pero no como algo abstracto y general, sino anclado de manera muy real en la vida de cada una de las personas que la sufren. Pero también un llamamiento a despertar, desde cada una de las personas que la sufren, de manera que puedan llegar a reconocer su propia dignidad y ponerse en marcha, sin dejarse señalar como culpables de su situación y promoviendo un cuestionamiento y una transformación colectiva, tanto de las estructuras socioeconómicas como de los espacios de gobernanza común. Porque es necesario ganar combates precisos frente a la injusticia y generar verdaderas oportunidades que permitan avanzar de manera real a quiénes viven en condiciones más difíciles. Sin embargo, no podemos esperar a que estas oportunidades se den en función de factores externos, sino que tenemos que provocarlas a partir de nuestra creatividad común puesta en juego.

¿Cómo hacer para ganar en esta lucha contra la pobreza en la que nos comprometemos día a día?Tenemos claro que el 17 de octubre es un día señalado que debe servir para darnos impulso y mantener este compromiso cotidiano. Para ello, concluimos la jornada señalando algunas claves comunes para sostener este combate por la dignidad de todos y todas, partiendo de ejemplos concretos compartidos por unos y otras en los que se habían producido avances significativos. Así surgieron algunos fundamentos que nos parece importante recordar y compartir para seguir en camino…

  • Seguir promoviendo la capacitación y el estudio, con especial atención para que quienes suelen quedarse fuera de estos procesos tengan también posibilidades reales de disfrutar de una formación adecuada y de calidad.

  • Seguir luchando para lograr que todos y todas tengan unas condiciones económicas suficientes para poder cuidar de sí mismos, de su familia y tener una vivienda digna. Pero este esfuerzo no debe enfocarse sólo al momento presente, sino crear también seguridades de cara al futuro.

  • Seguir reclamando que el trabajo sea garantía de desarrollo y reconocimiento personal, comenzando por unos salarios que reconozcan dignamente el esfuerzo y el tiempo que se dedica al mismo.

  • Seguir recordando que nuestra prioridad debe ser invertir en la gente y poner las bases para trabajar por el bien común.

  • Seguir creyendo en cada persona, reconociendo su dignidad y con el convencimiento de que tiene algo único que aportar.

  • Seguir creando las condiciones para que la movilización y participación plena de quienes viven en la pobreza sea posible:

    • Rompiendo las fronteras que nos separan, yendo al encuentro de quienes todavía faltan.

    • Ofreciéndonos para escuchar atenta y respetuosamente a quienes peor lo pasan.

    • Promoviendo tiempos y espacios de acogida y encuentro que den lugar a dinámicas de solidaridad.

    • Estimulando que cada persona pueda ser consciente de quién es, liberarse de la culpabilidad por vivir en la pobreza y convertirse en agente, junto con otros, de transformación y lucha por sus derechos y por los de los demás.

  • Seguir manteniendo la fe en el grupo y en lo colectivo como dimensión fundamental para poder transformar la realidad y crear las condiciones para una auténtica democracia que no deje a nadie de lado.

Seguimos en marcha, sí. Cada uno desde su realidad: en la Universidad, en el espacio asociativo o voluntario, en su labor cotidiana para buscarse la vida con la chatarra, en el trabajo de atención a otros ciudadanos y ciudadanas, en el cuidado de la familia y el vecindario… Seguimos en marcha, sumando inteligencias y capacidades, luchando día a día por construir un mundo en el que la extrema pobreza ya nunca más sea posible.

Y como seguimos en camino, el próximo 17 de octubre de 2015 tenemos una cita para compartir las victorias y avances que consigamos realizar este año. ¡Seguro que son muchas!