El pasado 10 de diciembre, en el Centro Social Galileo, Madrid, con motivo del Día de los Derechos Humanos, ATD Cuarto Mundo en colaboración con Marea Básica, organizaron una jornada de formación y encuentro bajo el título: “Derechos Sociales, ¿hermanos pequeños de los derechos humanos?”.
Durante la jornada de trabajo, se profundizó sobre las diferentes posibilidades que la Carta Social Europea ofrece a la hora de defender la violación de los derechos sociales en nuestro país.
Contamos con varias intervenciones que nos dieron una explicación desde el plano jurídico del uso y alcance de esta herramienta; desde la experiencia de otras organizaciones internacionales respecto al uso de las reclamaciones colectivas; desde el plano político con un seguimiento de las iniciativas realizadas para la ratificación de la Carta Social Europea por parte del Gobierno; y desde el plano organizativo y de la movilización social.
Las diferentes intervenciones están accesibles en vídeo gracias a la iniciativa de Solidarias. Sin embargo, nos gustaría resaltar algunos puntos básicos de este encuentro:
Derechos sociales, derechos humanos, Carta Social Europea, ¿grandes desconocidos?
Carmen Salcedo, en una intervención magistral, dibujó el esquema básico a tener en cuenta a la hora de entender la Carta Social Europea, sus herramientas y las razones fundamentales de su posible uso en tribunales nacionales como fuente para defender casos de vulneración de derechos sociales.
Afirmó que la Carta Social Europea es un instrumento jurídico muy poco conocido, incluso por profesionales del derecho y de la política. Demostró que es actualmente el estandar de protección de derechos más elevado y que sus diferentes instrumentos se puede utilizar para reclamar derechos ante los tribunales españoles cuando las normas del país, especialmente en tiempo de crisis y recortes, se sitúan por debajo de las normas internacionales ratificadas por España y que son de obligado cumplimiento. Ayudó a situar los derechos que España debe cumplir, los órganos de seguimiento (Comité Europeo de Derechos Sociales), y los instrumentos jurídicos que utilizan(conclusiones). También situó los otros órganos e instrumentos, reclamaciones colectivas y decisiones de fondo que podrían constituir una referencia en caso de que España ratificara la Carta Social Europea (revisada 1996) y el protocolo de reclamaciones colectivas (1995).
Dejó claro que es un recurso efectivo y eficiente, que es de obligado cumplimiento para España en función de la jerarquía de derecho y puso algunos ejemplos de su uso en tribunales de otros países.
Protocolo de reclamaciones colectivas, herramienta de protección para la sociedad civil
Berth Luyts, puso varios ejemplos de reclamaciones colectivas a nivel europeo tanto de ATD Cuarto Mundo como de otras asociaciones, en las que resaltó la importancia de este mecanismo y las posibilidades que abre a pequeñas asociaciones y organizaciones, mediante el apoyo de una ONG acreditada, a la hora de poder llevar ante organismos internacionales una situación flagrante de justicia. En ambos ejemplos y en un plazo más breve que en otros procedimientos judiciales, se instó a los Gobiernos de Francia y de Irlanda a actuar para reparar los daños como responsables de una situación de vulneración de derechos. Más allá de la facilidad de uso de este mecanismo, permite mantener la presión ante las autoridades sobre la injusticia que sufren colectivos y poblaciones y afirmar, públicamente, la responsabilidad de las autoridades respecto de esta situación. Al mismo tiempo aprovechó para compartir algunos puntos de referencia sobre las Rentas Mínimas Garantizadas fruto de la reflexión de personas en situación de extrema pobreza en Europa y que son fuente de análisis a la hora de entender mejor la propuesta de Renta Básica Universal. Advirtió contra algunas propuestas que podrían defender una Renta Universal Básica (Neoliberal) que se reducen a proponer una cantidad económica mientras desmantelan un sistema de protección social y de derechos y que, a largo plazo puede servir para aislar y juzgar aún más a las personas en situación más grave de pobreza.
Iniciativa Política en España, situación actual y pasos a dar
Isabel Franco, como representate de Unidos-Podemos en el Congreso, nos explicó las diferentes iniciativas que se habían llevado a cabo para lograr la ratificación de la Carta Social Europea (revisada, 1996) y el Protocolo de reclamaciones colectivas (1995). Explicó que se trata de una competencia del ejecutivo y que la moción presentada y aprobada por unanimidad era un recurso para mantener una presión política de cara a su ratificación. Explicó también que las justificaciones dadas por el ejecutivo para no ratificar la Carta Social Europea eran insuficientes, que se ha tenido tiempo, casi veinte años, para valorar y estudiar los posibles “errores” que pueden presentar y que, a su juicio, se trata de una manifiesta falta de voluntad para que se cumplan ciertos derechos sociales en el país. Los siguientes pasos son seguir informando y mantener la presión tanto en ámbitos políticos como en desde bases sociales.
Organizaciones sociales, principal instrumento de lucha. Pan y futuro.
En sus diferentes intervenciones, los miembros del colectivo Marea Básica situaron las perspectivas jurídica y política en sintonía con la realidad diaria de vulneración de derechos en razón de la precariedad y la pobreza extrema. Recordaron que ninguna herramienta legislativa, por muy eficaz que sea, puede avanzar en la lucha por el reconocimiento de derechos si no está movida por un brazo fuerte desde la calle. La legislación se defiende desde las comunidades y colectivos concienciados y organizados que son capaces de utilizar y movilizar a partir de dichos instrumentos. Recordaron también que los avances en derechos no se generan en los despachos, sino que vienen forzados por una concienciación social que pone de manifiesto la injusticia. Asimismo pusieron de relieve la importancia de mantener una lucha por el pan y la justicia diarias en situaciones de mucha indefensión e invisibilidad. Esta lucha puede utilizar los recursos jurídicos, los tribunales y las leyes. Pero, al mismo tiempo hay que seguir exigiendo un futuro más justo, y recuerdan que en este sentido su lucha por una Renta Básica Universal es esencial. Aprovecharon también para puntualizar los principales enemigos actuales de esta iniciativa: el asistencialismo, el laboralismo y la Renta Básica Universal neoliberal o individualista.
Invitaron a todo el público presente a participar en la movilización que se llevaría a cabo esa misma tarde y a mantener la movilización y la presión social para la defensa de todos los derechos.
Aprovecharon también para anunciar que la presión y la movilización social continua, como la injusticia y la precariedad, y que en el mes de marzo habrá una marcha de las Mareas Básicas hacia Madrid.
Una intensa mañana de formación, de debate y de encuentro entre colectivos y personas que, desde varios enfoques, luchan por hacer valer un Estado de derecho, de todos los derechos, donde el cumplimiento de las leyes no sea una excusa política sino una herramienta de defensa de los miembros más desprotegidos de la sociedad.